«... Me gusta la mano que sirve de unión entre el escritor y el lector. El librero es el amigo del libro; no de todos los libros sino de los que él considera lo suficientemente buenos para recomendarlos a los lectores. Los escritores deberían frecuentar a menudo estos lugares. No para comprobar si sus obras están bien expuestas sino para percibir cómo vive un libro, cómo circula de mano en mano, cómo se ojea, cómo se leen algunas líneas, luego se coloca en su lugar, se abandona en una esquina de la mesa o se decide que será el amigo de algunas noches.»
Fragment del llibre Elogio de la amistad, de Tahar Ben Jelloun
Foto: detall d'una venda de llibres al Mercat Dominical Sant Antoni (fotografia de Marcel Albet).
[ Publicat a Facebook el 13-10-2017 ]
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